Más de 30 grados de temperatura y un sol abrasador caían sobre San Bartolomé de Tirijana ayer al comienzo de la segunda jornada de desfiles de la pasarela Gran Canaria Swimweek by Moda Cálida, y en la que un total de ocho firmas de las denominadas “consagradas”, mostraron sus propuestas de moda baño de cara a la temporada Primavera/Verano 2024.
En un ambiente distendido y que “olía” a fin de semana, con las gradas llenas de público ávido de ver los desfiles y un front row pleno de medios de comunicación y caras conocidas como el televisivo estilista Josie o el modelo internacional Pelayo Díaz o las influencers Marta Sierra, Marta Ibrahim o Gema Betancourt, entre otras, también algunas internacionales, daban comienzo los desfiles, caracterizados todos por la elegancia, glamour y el enfoque sostenible de sus creaciones beachwear.
Peque de Fortuny y Cristina Torras, madre e hija y fundadoras de la firma catalana Bohodot presentaron una colección redonda, y romántica, denominada “île du Soleil” y que rinde homenaje a la esencia y frescura del verano. Pero va más allá en términos de estilo y de proyección. Aires étnicos sin aspavientos, estampados geométricos en lurex, jacquards o en forma de laminados mínimos, pero siempre elegantes, toman forma gracias a brillos o texturas ricas en estructura, y corte, y que adornan con detalles o abalorios sutiles que sofistican y empoderan sin exceso.
Le siguió sobre la escena grancanaria la firma italiana Edelvissa, que por segundo año ya en Gran canaria Swimweek by Moda Cálida volvió a mostrar una colección soberbia en cuanto a saber hacer, elegancia y prestancia. Bajo el nombre Villa, la colección venidera es un prodigio de formas seductoras y modernas inspiradas por el lifestyle de las familias pudientes italianas. Ese rico de toda la vida que ha nacido para el “dolce far niente”y que combina sofisticación y poder en una estética regida por el buen gusto. Colores atractivos, vibrantes y casi siempre en bloque salvo algún Jacquard suave texturizado y que crean un efecto atractivo gracias a cortes y líneas limpias y depuradas de elegancia natural. A destacar, un tejido con efecto devoré laminado ecológico y texturizados 3D en piezas de resultado perfecto.
Llegaba el turno de la firma homónima de Melissa Odabash, que desfilaba por tercer año consecutivo sobre la pasarela grancanaria y que es toda una sensación en términos de elegancia, en eso que se denomina moda resort. Calidad y estilo a raudales en una colección confeccionada en base a ricos tejidos italianos y que aportan prestancia y distinción. Los estampados, rescatados tirando de archivo, pero ahora reeditados en clave ética son parte de una colección cápsula confeccionada a partir de hilos regenerados y tejidos responsables medioambientalmente hablando, en una clara declaración de intenciones de por dónde va la historia en la moda beachwear. Al menos la suya. En la gama cromática, desde los eternos blanco o negro, aplicados con sabiduría en trajes de baño o bikinis de factura impecable y vestidos, algunos en croché otros en seda, que ahondan en la elegancia más sensual, a tonos más suaves y llevaderos en el día a día en cualquier jornada estival incluso si ésta se alarga.
La tarde avanzaba y la cosa se ponía reivindicativa, esta vez de la mano, y vo0z en off, de Nicole Mentado, mente creativa tras Maldito Sweet, que hizo un alegato al peligro que acecha a los océanos si no tenemos cura de ellos. Pero no sólo se reivindicó en lo ambiental, también a través de una colección madura, estructurada y femenina, en forma y estilo. Un estilo, el suyo trasmitido a través piezas trabajadas en la forma en base a ricos tejidos que combinan la lycra, las transparencias y los abalarios y que, inspirados en el océano, toman forma mediante vivos colores y cortes favorecedores y ultrafemeninos.
Otra marca que reivindicó, en este caso su estilo y su forma de ser, y ver, la moda, fue Como un pez en el agua, que con su colección para la temporada estival 2024 propuso una línea de baño fresca en cuanto a los diseños y patrones, que favorecen, alegre y vibrante en lo cromático, que va del malva o el rosa pastel al coral pasando o el turquesa, y diversa y profunda en lo que a estilos se refiere, siempre bajo las máximas comfort, calidad y tendencia. Trio ganador.
En uno de los momentos dedicados a las propuestas masculinas en esta Gran Canaria Swimweek by Moda Cálida, llegó el turno de Chela Clo, la marca liderada por el local Jorge Toledo y que hace de la normalidad, un don. Serena, tranquila y por qué no, comercial (que de eso se trata parte de todo este show, de vender) su colección es además ponible, fácil y de aires casi básicos si hablamos de estilo, sólo roto por sus dos vertientes de estampados en los bañadores; la étnica con vibrantes toques vintage y los más audaces y vistosos.
Uno de los momentos más esperados de la tarde sobre la pasarela grancanaria era el desfile de Palmas Swimwear, un referente en eso que se denomina “moda de autor” y que, valiéndose de obras de artistas como Van Gogh, Gauguin o Modigliani, entre otros, obtenidas del fondo documental del Instituto de Arte de Chicago, nos propone sacar el arte de los museos para trasladarlo a playas y calles. En ese trayecto, este artista del diseño y la confección nos pinta una colección impecable en cuanto formas y patrones, comprometida con el estilo exquisito y en base a tejidos ricos, livianos y de colores sublimes que sirven de lienzos para esas obras de arte que adopta, estampa, y adapta, con la maestría de un expresionista moderno sobre elegantes piezas de baño, vaporosos vestidos, holgados pantalones o sedosas camisetas. ¡Qué arte, Pedro! Nunca mejor dicho.
Y de artista a artista. En este caso del color. Finalizando la jornada segunda de desfiles la colección de Agatha Ruiz de la Prada, que incorpora los iconos más representativos de su marca al tejido estrella de los jóvenes Beltho Couture; el tul, para ofrecer una colección vitalista, alegre y feliz que aúna a la perfección la propuesta slow fashion de la moda de nuestros días con el rendimiento de lo comercial de toda la vida. Un binomio ganador aplicado de forma siempre original a bombers, bermudas, bikinis, bañadores o camisas de patchwork de estructura fácil y vistosidad superlativa.
